A la hora de querer proteger nuestro hogar, uno de los sistemas que más se usan son las cámaras de seguridad. Pero esto puede tener importantes problemas en materia de protección de datos, ya que puede captar la zona de paso de terceras personas, sobre todo cuando se instalan apuntando hacia la calle o al rellano.
En los últimos años, hemos visto como han proliferado las mirillas inteligentes que apuntan de manera directa al rellano, y que recientemente ha suscitado en una multa por parte de la AEPD de 300 euros. Pero esto es algo que también se aplica a las cámaras de seguridad que se instalan en el exterior, con un caso que llegó incluso a los tribunales de justicia europeos.
Cuidado con las imágenes que toman tus cámaras de seguridad
Tal y como ha recogido el medio Confilegal, entre el año 2007 y 2008 un hombre de República Checa instaló diferentes cámaras de seguridad en la fachada de su hogar. Todo esto en respuesta a diferentes actos vandálicos que se habían producido contra su hogar. Todas estas grabaciones se almacenaban en un disco duro al que solo él tenía acceso.
Y gracias a este sistema de videovigilancia pudo determinar los autores de un acto vandálico contra su fachada, donde varias personas con un tirachinas consiguieron romper sus ventanas. Estas pruebas fueron determinantes para su identificación y posterior denuncia. Pero uno de los sospechosos quiso que se analizara si la colocación de esas cámaras eran legales.
La Agencia de Protección de Datos nacional determinó en ese momento que el dueño de las cámaras había cometido diferentes delitos al estar grabando a terceras personas sin su consentimiento. Ante esta situación comenzó a apelar a los tribunales de justicia que no le dieron la razón, hasta que uno de ellos elevó una cuestión prejudicial al Tribunal de Justicia Europeo.
Este alto tribunal tiene como objetivo velar por el cumplimiento de la legislación comunitaria, aunque sus decisiones no tienen carácter vinculante para las decisiones judiciales nacionales. Si bien, marcan una importante jurisprudencia para todos los países de la eurozona incluida España. Es por ello que su decisión nos interesa a la hora de colocar cámaras de vigilancia en nuestro hogar.
El tribunal estableció en su sentencia C-212/13 que la imagen de una persona es un daño personal y es por ello que el grabarla sin consentimiento incumplía las normas comunitarias. Todo esto porque la colocación no enfocaba únicamente la propiedad privada, sino que también cogía parte de la vía pública.
Todo esto hace que sea importante que si vas a instalar cámaras de seguridad en tu vivienda se garantice que todas las imágenes que se tomen sean dentro de tu propiedad. Porque como vemos, hasta en el caso de que estén cometiendo algún acto vandálico, se va a poder reclamar por el uso de estas imágenes.
Imágenes | Alan J. Hendry Scott Webb
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